Esta vez, el equipo de Noctambulante se voló la barda. Con una variada selección de películas, todas ellas realizadas por la productora británica Hammer Films desde finales de los años 50 hasta principios de los 70, nos deleitaron con algunas de las mejores cintas de este importante exponente del cine de horror. Esta casa productora hacía cintas de serie B como se debe: aprovechando al máximo su limitado presupuesto y con mucho cuidado del guión (al fin que escribir cosas buenas no cuesta más dinero). Fue difícil escoger un área de proyección para pasar toda la noche, pues la programación en ambas era de lujo.
Nos decidimos por el área 1, la cual arrancó con The Curse of Frankenstein (Terence Fisher, Reino Unido, 1957), primera cinta filmada a color por la Hammer y que dio inicio al revival del horror gótico en el cine. A diferencia de la novela de Mary Shelley, aquí el barón Frankenstein no es una víctima inocente que sufre por los crímenes de su creación, sino hasta cierto punto la inteligencia detrás de ellos. Una versión más oscura, la criatura interpretada por Christopher Lee tiene un aspecto terrorífico, aunque palidece en comparación a la versión de Boris Karloff (y ambas carecen de la destreza verbal de su versión literaria).
Luego se dio paso a The Horror of Dracula (Terence Fisher, Reino Unido, 1958), donde prácticamente el mismo equipo se da a la tarea de adaptar otro gran clásico de la literatura gótica. Las variaciones son inventivas, como el rol de Jonathan Harker como un cazador de vampiros asociado a Van Helsing (quien es traído a la vida de manera convincente por Peter Cushing). Pero el conde de Lee carece de dimensiones humanas: no es un alma torturada ni sufre de amor o de soledad. El enfoque de la Hammer nuevamente queda demostrado por sus ganas de actualizar la historia y su propensión a los baños de sangre.
La tercera cinta de la noche la pude ver en otro Noctambulante del año pasado, pero disfruté viéndola de nuevo. Frankenstein created Woman (Terence Fisher, Reino Unido, 1967) es una "secuela" que nada tiene que ver con la novela o la primera película, simplemente rescata al barón Frankenstein y a sus estudios para buscar derrotar a la muerte. Una jovencita marcada por una horrible cicatriz que le cubre media cara se enamora del asistente del científico. Éste, tras involucrarse en una trifulca con tres jóvenes adinerados, es acusado de un crimen que no cometió y condenado a la guillotina. Tras su muerte, la chica se arroja a un río. Frankenstein logra preservar el alma de su ayudante y, teniendo a su disposición el cadáver fresco de la joven, decide depositar el espíritu incorpóreo en ella tras "reparar" su defecto facial. De manera muy retorcida, la criatura resultante irradia belleza pero ignora su identidad y sufre de impulsos homicidas que buscan venganza.
The Gorgon (Terence Fisher, Reino Unido, 1967) se aleja de las adaptaciones literarias o secuelas no autorizadas para más bien desarrollar una idea original basada en un personaje mitológico. La última de las gorgonas ha reencarnado en una mujer británica a principios del siglo pasado y, cada noche de luna llena, petrifica a los incautos que se cruzan en su camino. El padre de un artista que fue culpado por una de estas muertes decide investigar al respecto y se topa con un misterio en el cual están involucrados un científico y su bella asistente.Un poco predecible, pero me gustaron las caracterizaciones de Lee y Cushing, los cuales lucen imágenes bastante diferentes a las habituales.
La verdadera razón por la que elegimos esta área fue que se proyectaría The Vampire Lovers (Roy Ward Baker, Reino Unido, 1970). Adaptación de Carmilla, de J. Sheridan Le Fanu, novela corta de 1872 que fue la primera en mostras vampiresas lesbianas. Bastante fiel al material fuente, con una generosa carga de erotismo sin llegar a ser gratuita ni explotativa, marca el inicio de la tendencia decadente de la Hammer, que empezó a recurrir cada vez más a la desnudez para atraer audiencias a las salas de cine (cabe mencionar que esta estrategia no funcionó y fue el principio del fin de esta gran productora).
Para terminar la jornada cinéfila tocó el turno a The Witches (Cyril Frankel, Reino Unido, 1966), basada en la novela Devil's Own. Esta historia sobre vudú y brujería en un pueblito aparentemente idílico tiene un buen desarrollo y un giro bien implementado, aunque la trama tenga una que otra falla. La manera de mostrar rituales paganos es bastante perturbadora, en particular la escena en la que una muñeca vudú se mueve de manera escalofriante por tener un gato adentro.
Y eso es todo por ahora, sólo nos queda esperar a que se anuncie la programación del próximo Noctambulante y descansar para reponer las energías y estar preparados para desvelarnos viendo películas.
Ahhhhh!!! Amo las películas de la Hammer, son de las pocas de horror que sí puedo ver porque no espantan jajajaja :P
ResponderEliminarAndresito tuvo a bien presentarme a Hammer Films con The Devil Rides Out, donde Cristopher Lee (que no queda claro a qué se dedica pero por alguna obvia razón sabe mucho de rituales oscuros) trata de salvar a su amigo de iniciarse en un grupo satánico, luchando contra el líder de la secta quien con cuyo poder mental es capaz de aparecerse en espejos retrovisores y muchas cosas más. El final es TODO un viaje y no pude ocultar una sonrisa de fascinación durante casi toda la cinta.
Ahora siento un deseo irresistible de volver a HMV y traerme toda una colección. :D