Este año han salido varios comics mexicanos de mucha calidad. El aquí reseñado es producto del talentoso Tony Sandoval y fue publicado por Editorial Caligrama, que también ha publicado con anterioridad otros trabajos del autor (El cadáver y el sofá y Gris a través de los otoños, este último ilustrado por Patricio Betteo). La edición es bastante lujosa y, por lo mismo, de un costo elevado, pero lo vale. Con un formato "album" -que consiste en un tamaño más grande que el del comic tradicional- se puede apreciar de mejor manera el arte del libro.
Y qué arte es. El estilo de Sandoval incorpora elementos del comic europeo y no se parece a nada de lo que estamos acostumbrados a ver en este continente, en nuestro país ni en el vecino del norte. Varias páginas carecen de viñetas y recurren a ilustraciones a página completa con un gran poder visual. Y sus personajes son dibujados con trazos muy expresivos, dándoles un amplio rango de emociones.
Nocturno es varias cosas al mismo tiempo: una peculiar interpretación del género de los superhéroes, una nostálgica historia de un joven perseguido por fantasmas, una historia de romance, batallas con mosntruos marinos y conciertos de heavy metal. Lo único malo es que, al llegar a la última página, encontramos la leyenda "Fin de la primera parte," lo cual nos deja con muchas dudas y con ganas de que salga el segundo volúmen. Espero que no tarde mucho.
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